Resulta que la revista científica Nature publicó un estudio en donde se determina la relación entre el antígeno leucocitario humano (HLA) y la atracción sexual. Mediante las neuronas olfativas -y quizás otros medios- las personas inconscientemente detectan si su HLA (el sistema inmunológico) es opuesto al de su pareja. Si lo es, entonces hay mucha atracción y por lo tanto unas ganas enormes de intentar reproducirse con él o ella.
La razón por la que fuimos creados así, es porque entre mayor sea la diferencia de antígenos, los potenciales padres son premiados con mayor satisfacción sexual y también con crías con resistencia a un mayor número de enfermedades.
Por lo tanto, si son enfermizos significa que sus papis no se olieron bien o no se besaron suficiente o simplemente no se dieron la oportunidad de conocer a alguien con un diferencial de HLA mayor. Como resultado de esto, su descendencia (o sea ustedes) está en clara desventaja evolutiva en comparación a aquellos cuyos padres se la pasaban encerrados en la habitación dándose amor.
¿Tú eres enfermizo? o ¿Eres hiper sano? Presume comentando #soytansanoque o justifica tu débil sistema inmunológico. De cualquier manera, vas a dejar tu comentario, OK?